Café, conversación...

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miércoles, 3 de marzo de 2010

Shutter Island


La gente se esperaba otra cosa. Esperaban mafiosos, calles y redención. Y va Scorsese y les pone delante una historia con poli, sí, pero también con psiquiátrico y terror incluidos. Pero que nadie se equivoque, no ha hecho nada diferente a lo que nos tiene acostumbrados, es decir, nada que se aleje de lo que entendemos por obra maestra, o al menos, cine del bueno.

En su cuarta colaboración con DiCaprio (esto ya empieza a ser una factoría con un producto excelente) nos encontramos con un thriller de corte clásico: una interna se ha fugado de un psiquiátrico penitenciario en una isla y un par de agentes federales (DiCaprio y Mark Ruffalo) acuden al centro dirigido por un psiquiatra que cree en una terapia diferente (Ben Kingsley) y donde las cosas no son lo que parecen.

Desde la imagen inicial, un barco que aparece entre la niebla, ya nos remite directamente al cine clásico, a las películas de terror en blanco y negro, o incluso, a la serie B, con ese faro donde, se dice, ocurren cosas terribles. Esto se percibe también en el uso de ciertos planos o música (la entrada al psiquiátrico, acercándose con la música en crescendo es impagable).

Al ambiente claustrofóbico y obsesivo (que va aumentando hasta explotar en un final impresionante) se le añaden unas interpretaciones excelentes, donde destaca DiCaprio, en la que puede que sea su mejor actuación con Scorsese hasta ahora (por lo visto tienen en el punto de mira más de un proyecto) y Ben Kingsley, aportando a su personaje el refinamiento y misterio que necesita.

En definitiva, Scorsese no nos ha traído de nuevo las malas calles, pero nos ha llevado a un lugar igualmente peligroso, oscuro y turbulento, nos ha llevado al interior del miedo. Tras verla solo me queda una pregunta: ¿qué hubiera pasado si el proyecto hubiese ido a parar a su primer candidato, David Fincher?

3 comentarios:

Nikaperucita dijo...

Pues tengo unas ganas de ver la de Scorsese...

Neurax dijo...

Pues tenía ganas de verla y después de leerte, más todavía. De este finde no pasa...

Saludos

Auggie Wren dijo...

Realmente merece la pena, incluso con lo caro que se está poniendo ir al cine.

Sláinte.